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( Continuació)
El día 18 de Juliode 1.936, me encontraba formando parte, de la "Guardia del Día", del Hospital Provincial ,de Huelva, que estaba compuesta, por el Médico Don Manuel Vázquez de la Sierra, el Practicante, Don Alfredo Serrano Gil, y el autor de estas líneas, que actuaba como Topiquero.
Por las tardes, nos sentábamos een el porche .alrededor de una mesita, en la que tomábamos, algún que otro refresco, en la época estival.
Mandamos a "Dominguito", que era el mandadero oficial del Centro, a la "Esquinita te espero" para que nos comprara, el consabido "Cartucho" de "Pescaito frito".
Nos llamaron , desde la "Cerveceria Viena", para que enviásemos unos camilleros, para recoger el cadáver de Miguel Ocaña, que habia sido asesinado, en los Salones de Billares, advirtiéndoles que llamaran a la Cruz roja, que disponían de tal servicio.
Ya, aanochecido,transitaba ,por el Paseo de la Independencia, una Sección de la Guardia Civil a caballo, con dirección al Cnetro, para imponer el Orden Público. algo alterado.
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El Oficial de la Farmacia hospitalaria, nos comunicó, que en Äfrica se había levantado el Ejército contra el Gobierno de la República.
El Médico de Guardia, ante unos disparos que sonaban por la calle Ginés Martín, ordenó que se cerrara la puerta del Hospital .
Pasadas unas horas, sonaron en la puerta varios aldabonazos, y como se encontraran de servicio una pareja de la Guardia de Asalto, quw custodiaban a los detenidos, que se hallaban hospitalizados, tomaron las precisas medidas de precaución, y al abrir la puerta, aparecieron cuatro municipales, entre los que se encontraba un de ellos, con una herida de bala en el muslo.
Todo el personal sanitario de Huelva, se encontraban de servicio permanente, en el Hospital, para atender a todos los casos de emergencias que surgieran en la ciudad .
Por las noches , dormíamos en la Iglesia de la Merced, convertida en un gran almacén de viveres, en prevención de agravarse la críticaa situación, que se iba presentando.
A la mañana siguiente, nos vimos sorprendidos, ante la presencia en el portal del Centro, de dos escopeteros, encargados del Orden Público.
La capital fue ocupada por las tropas legionarias del General Queipo de Llanos,Entramos en un Régimen, que nos privó de nuestros Derechos y Libertades, durante cuatro Décadas.
( Continuará) .
Pasadas unas horas, sonaron en la puerta varios aldabonazos, y como se encontraran de servicio una pareja de la Guardia de Asalto, quw custodiaban a los detenidos, que se hallaban hospitalizados, tomaron las precisas medidas de precaución, y al abrir la puerta, aparecieron cuatro municipales, entre los que se encontraba un de ellos, con una herida de bala en el muslo.
Por las noches , dormíamos en la Iglesia de la Merced, convertida en un gran almacén de viveres, en prevención de agravarse la críticaa situación, que se iba presentando.
A la mañana siguiente, nos vimos sorprendidos, ante la presencia en el portal del Centro, de dos escopeteros, encargados del Orden Público.
Así, siguieron los días. mientras eran incendiadas la Iglesia de las Madres Agustinas y la Parroquia de la Concepción, mientras eran asaltadas las del Polvorín, San Francisco y la Cinta. hasta el día 29 de Julio, en el que opor la mañana ,un avión de la Base Aérea de Tablada, sobrevoló el Molino de la Vega,arrojando varias bombas,matando a una joven, que ingresó cadáver, con la cara destrozada por la metralla.