miércoles, 29 de diciembre de 2010

LOS ALCALDES DE HUELVA (I I I)




Tras la celebración de las primeras Elecciones Municipales, dentro de la Democracia, toma el mando del Consistorio onubense, Don José Antonio Marín Rite, con cuya gran gestión, Huelva empieza a presentarnos una nueva imagen, con la puesta en marcha de la Avenida de Andalucía, que le da un gran empaque, ante su confortable y bellísimo bulevar, con una jardinería digna de los mayores elogios, que constituye la entrada de la ciudad , que nos da prestigio y orgullo, a todos nuestros conciudadanos.

Al mismo tiempo, nuestras calles adquieren un modernísimo aspecto al ser transfomado el antiguo adoquinado, en zonas asfaltadas, para alivio del tráfico urbano, que es admirablemente aceptada por el vecindario.

Nace la nueva Universidad de Huelva, que constituye un paso agigantado, en la vida docente, de nuestra ciudad, ofreciendo a la juventud estudiantil de la provincia, poder alcanzar, una titulación superior, sin necesidad de desplazarse fuera de casa.

En 1.985, con la nueva victoria del Partido Socialista, le dan el sillón de la Alcaldía a Don Juan Ceada, que nos dejó, como testigo de su gestión municipal, el Parque de Alonso Sánchez, que después de haberle costado a las arcas del Ayuntamiento, unos ochocientos millones de las antiguas pesetas, y de constituir una obra arquitectónica ejemplar, ha sido un fracaso, ante el rechazo de la población, por la falta de seguridad que demuestra tener, toda vez que en actualidad, representa un gran refugio para la drogadición.

En la siguiente confrontación electoral, obtiene la aceptación de los ciudadanos el Partido Popular, siendo elegido, Alcalde de Huelva, Don Pedro Rodríguez González, quién con su ilusionado trabajo, sabe enaltecer el onubensismo, en grado sumo, consiguiendo el resurgimiento de nuestras tradiciones populares.

Así, han alcanzado gran auge las Fiestas Colombinas, la Velada de la Cinta, la celebración de las fiestas de San Sebastián, los Carnavales, Semana Santa, el Rocío etc etc.

Se ha llevado a efecto la realización de los Parques Moret- verdadero pulmón de Huelva-, así como el de Zafra, como también vemos la proliferación de coquetones jardines, fuentes, glorietas y presencia de múltiples monumentos, que hacen de Huelva, una ciudad acogedora, dotada de un Sol, deslumbrante, y de un Cielo azul , maravilloso y único, que es el orgullo de propio y foráneos.

Su, gran actividad, se pone de manifiesto, en cada momento, gozando los ciudadanos de una gran zona peatonal, para el acercamiento de la población al perímetro comercial, que lo tiene a su alcance.

Pero, la actual crisis económica que nos atenaza, ante la aparición de esa gran burbuja, que ha presentado la furia del ladrillo, ha dado lugar el descenso de licencias de obras, como asimismo, que al no adquirir los pisos, que en la actualidad están en ofertas y no se venden, hacen que las altas en la Contribución Urbana, hayan dado lugar a un descenso en la recaudación, que mantengan, en estado de agonía las arcas locales, y se encuentre sin recursos, para iniciar nuevas realizaciones.

La situación de España, en estos momentos, es muy crítica, y pidamos a Dios, que nos envíe un haz de luz, para poder disipar estas tinieblas, para gozar de nuevo de felicidad todos los españoles.


ón vecial

miércoles, 22 de diciembre de 2010

LOS ALCALDES DE HUELVA ( I I )


Una vez liberada Huelva, por las tropas del General Quepo de Llanos, el día 28 de julio de 1.936, se nombró una Gestora Municipal, presidida, por el industrial peletero, Don Apolinar Arenillas Bueno, y en la que figuraban, entre otros Don Urbano Carballo, propietario del acreditado "Hotel Urbano", el prestigioso comerciante de tejidos, Don Diego Fidalgo, y otros activos representantes , de la vida activa de esa localidad.

Es designado, para ocupar la Alcaldía, el industrial onubense, Don Joaquín González Barbas, quién llevó a cabo la transformación de la ciudad, con la construcción del nuevo Consistorio, en el antiguo solar de la vieja Cárcel Provincial, ubicada en el vetusto Convento de San Francisco, que antaño hizo las veces de Cuartel. Asimismo, levantó, en la Plaza de las Monjas, la Fuente Magna, toda ella de granito, en la que figuraban dentro del grupo artístico, dos tiburones, que en la actualidad, se encuentran en los jardines del Cementerio de la Soledad, como también se llevó a cabo, la ejecución del primer tramo de la Gran Vía, y el Hotel Tartesso, reconvertido en el actual Gobierno Civil.

En la procesión del Corpus Christi, del año 1.942, presentó la Sección Montada de la Policía Municipal, de gran gala.

Al año siguiente, 1.943, le sucede en el cargo, el Administrador Principal de Aduanas, Don Ramiro Ruedas de Andrés Moreno, quién realizó una gran operación dineraria, para las arcas municipales, ya que en plena Guerra Mundial, ante el rápido avance de las tropas alemanas, los ingleses de la Compañía de Riotinto, se deshicieron de las dos fincas, "La Esperanza" y la "Huerta Mena", cobrando por ellas al Ayuntamiento 75o.ooo pesetas, que las adquirió para expansión de la ciudad.

Para que se den una idea clara, nuestros lectores, de los beneficios de esta gran gestión, el Instituto Nacional de Previsión, adquirió el solar para la futura residencia Sanitaria "Manuel Lois", por el que abonó cinco millones de pesetas, más otras ventajas económicas, que expondré, mas adelante.

Los municipios españoles, a iniciativa del onubense, acordaron concederle al anterior Jefe de Estado, la Espada de la Victoria, y en su mandato, le tocó hacerle la entrega, con motivo de su visita a nuestra capital.

En 1.948, ocupa el sillón de la Alcaldía, el Capitán de Fragata, Don Pedro Pérez de Guzmán y Urzaiz, con el que se inaguró en 1,951, el nuevo Ayuntamiento, con la asistencia del Ministro de Obras Públicas, General Fernández Ladrera.

En el año 1.952, toma posesión de Mando Municipal, el comerciante local, Don Juan Rebollo Jiménez, que proveyó de juguetes, a todos los hijos de funcionarios y obreros municipales, en los años de su mandato, con motivo de la festividad de los Reyes Magos.

Le sigue en la sucesión, el Abogado de Estado , Don Rafael Lozano Cuerdas, quién ante el deplorable servicio, que presentaba los viejos "Riper", como les llamábamos los onubenses, de la Empresa Pera Bayo, le instó a esta, que llevara a cabo, la modernización del mismo, pero ante, la imposibilidades económicas, nos brindó la implantación de seis magníficos autocares de servicio urbano, que hicieron su entrada en la capital, en la tarde del día 6 de enero de 1,953, y que constituyó la base, para la creación de la gran flota, con que hoy día disfrutamos todo el vecindario local.

Construyò la Avenida de Federico Mayo, quién ostentaba la Dirección General de la Vivienda, y como fuera compañero de estudios, del mismo, le hizo efectivo al Ayuntamiento de Huelva, el valor de todos los solares de dicha vía urbana, como también, los de la entonces, en construcción, la de Pío XII, que es a lo que me refería, al hacer mención anteriormente, en este momento.

Sube al sillón de la Alcaldía onubense, el Abogado Don Antonio Segovia Moreno, que embellece la ciudad, arbolándola con gran profusión de naranjos, que en las primaveras, nos ofrecían la fragancia de su azahar, como igualmente instala un nuevo servicio de semáforos, para regular el tráfico local.

Le reemplaza en su cargo Don Fedérico Molina Orta, que bajo su mando, Huelva experimenta una gran transformación, con la creación del Plan de Desarrollo Industrial, que hace cambiar la fisonomía de la ciudad, modernizando la entrada de la capital, que como premio a su gran labor, lleva su nombre.

Es sustituido por el Ingeniero de Minas, Don Diego Sayago, que sigue ejecutando la política de su antecesor, dando vida a la nueva barriada del Torrejón, dotándola de todos los servicios urbanos.

Y como último Alcalde del anterior régimen, figura Don Carmelo Romero,que una vez restablecida la Democracia, en España, recibe, en su mandato, la primera visita del Rey de España, Juan Carlos I.


miércoles, 15 de diciembre de 2010

LOS ALCALDES DE HUELVA (I)




Inicio esta Segunda Parte, de Memorias Onubenses, dedicada a los Alcaldes, que han regido, el Ayuntamiento de Huelva, a partir del año 1.926, en que empecé a ejercitar el uso de la razón, toda vez que he sido una persona, que he llevado a cabo la práctica de archivar, todos los momentos, más trascendentales, de los que he sido testigo presencial, en mi dilatada existencia.

Así, recuerdo, a aquel popular Alcalde, don Juan Quintero Báez, cuando iba presidiendo, en representación de la ciudad, el entierro del malogrado torero onubense, Manolito Báez "Litri", aquella tarde del día 18 de febrero, que siendo un niño, presencié en la calle de la Concepción.

Y, la ofrenda, que hizo a la ciudadanía, al dotarle de un espléndido servicio de abastecimiento de aguas, procedente del Tranco de Beas, que supo superar el gran déficit de tan preciado líquido, que sufríamos los onubenses.

Me vienen, a la memoria, aquellas tardes, en que las calles de Huelva, nos ofrecían, esas inolvidables imágenes, en la que las bocas de riegos se convertían en gigantescos surtidores, con motivo de la limpieza de las tuberías de conducción.

Le sucedió, en su cargo, el industrial tipográfico, don Antonio Plata de la Corte, quién consiguió la erección del Parque Moret, en terrenos que poseía la ciudad, desde hacia bastante tiempo.

Ello, vino a constituir una gran novedad para nuestros convecinos, que en las tardes de los domingos, convertían la Avenida de Manuel Siurot, en un hormiguero humano, para visitar unas instalaciones admirables, al presentarnos una gran glorieta, con un fantástico estanque, poblado de patos y cisnes, que continuaba por un corredor de rosaledas, para terminar en una gran plaza circular, dotada de bellos bancos, con una encantadora policromía que nos brindaban su azulejería.

Existía un gran palomar, representando la Cruz de la Rábida, en cuyas proximidades, se encontraba la célebre y popular, mona Rita, que nos encantaba a todos los visitantes, como su acompañantes, una cierva y una raposa.

En el año 1.928, es nombrado Alcalde, don Guillermo Duclós López, que permaneció en el cargo, hasta 1.930, transformando los jardines y arboleda de la ciudad, para ser reemplazado, nuevamente por el Sr. Quintero Báez, que en la tarde de su toma de posesión, al salir de clase del Colegio de San Casiano, nos vimos sorprendidos, al ver como la Banda Municipal de Música, interpretaba un concierto, ante la vetusta fachada de la Casa Consistorial, en la calle del Puerto, como homenaje al nuevo regidor, por su feliz actuación, en su anterior etapa de su mandato.

El día 14 de abril de 1.931, es proclamada la II República Española, y es elegido primer Alcalde del nuevo regimen, don Amós Sabrás Gurrea, cuyo mandato duró cuatro meses, por haber obtenido el escaño de Diputado a Cortes.

Durante el tiempo del ejercicio de su misión, solo se redujo a colocar una gran pizarra, orlada por la bandera tricolor, en la vieja fachada de la Casa Rectoral de la Parroquia de la Concepción, donde se daba a conocer las Órdenes de la Alcaldía,

Le sucede, don Carlos Oliveira Chardenal, que durante su gestión, sufrió la pérdida de un hijo, que fue atropellado por un autobús, de la Empresa Pera Bayo, en las proximidades del Paseo de Santafé.

Tras, dos años de ejercicio, fue sustituido, por el probo funcionario de la Compañía Riotinto, don José Barrigón Fornieles, que rigió el Ayuntamiento, hasta las elecciones del 12 de febrero de 1.936, en las que triunfa el Frente Popular, ocupando la mas alta magistratura local, el prestigioso Agente Comercial, don Salvador Moreno Márquez, quién con motivo del Alzamiento Militar, tuvo que exiliarse, junto a otros mandatarios onubense, a Casablanca.










miércoles, 8 de diciembre de 2010

RESUMEN HISTÓRICO, DE UNA ETAPA VIVIDA ( IV )




Con el fallecimiento del Jefe de Estado, Don Francisco Franco Bahamonde, y en virtud de lo dispuesto en la Ley de Sucesión, se restablece en nuestro país , la Monarquía Española, siendo proclamado , por las Cortes Españolas , Rey de España el Príncipe, Don Juan Carlos de Borbón y Borbón.

Con ello, en nuestra nación, se abre, al cabo de cuarenta años, el sistema democrático, y tras un breve espacio de tiempo, estando en el Poder, don Carlos Arias Navarro, es relevado de su cargo, como Presidente del Gobierno , por don Adolfo Suárez González, iniciándose con él, la etapa de Transición, con la que se legalizan los partidos políticos, creándose, en su mandato, el nuevo Estado de las Autonomías.

Se celebran elecciones constituyentes, y por el Congreso de los Diputados , se nombra una Comisión, que se encargaría de redactar, el proyecto de la nueva Constitución, que en el año 1.978, es debatida, quedando aprobada, por todos los grupos parlamentarios, la Constitución Española, el día 6 de diciembre, vigente en la actualidad.

Una vez, que ésta, entra en vigor, se disuelven las Cortes, y en el debate de investidura, del Sr. Calvo Sotelo, el hemiciclo de la calle de San Jerónimo, es tomado por fuerzas de la Guardia Civil, al mando del Teniente Coronel Tejero, siendo abortado el golpe, por la eficaz actuación del Rey de España, Juan Carlos I, quien ordenó a los golpistas, a deponer las armas.

En el año 1.982, se convoca a los españoles a las urnas, triunfando el PSOE, que es nombrado Presidente del Gobierno, Don Felipe González Márquez, que se mantiene , en el Poder, durante tres legislaturas, hasta el año 1.996, que en la nueva consulta , hecha a la ciudadanía, alcanza la mayoría absoluta, el Partido Popular, poniéndose, al frente del Gobierno Don José María Aznar, cuyo ejecutivo logra sanear, con Don Rodrigo Rato, como responsable del Ministerio de Economía, las maltrechas arcas de nuestro erario, que les dejaron el gobierno socialista.


Vuelven a celebrarse nuevos comicios, en el año 2.002, y debido al accidente terrorista, en la Estación de Atocha, en Madrid, ante la confusión creada, sale nuevamente, triunfante, el Partido Socialista Obrero Español, presidiendo el Gobierno, Don José Luís Rodríguez Zapatero, que permanece, en la actualidad.

En estos difíciles momentos, en que atraviesa España, ante una descomunal crisis económica, de ámbito mundial, de la que no terminamos de levantar cabeza, surgiendo, a consecuencia de ella, un malestar general, toda vez, que el gobierno, se ha visto obligado a tomar drásticas medidas, para hacer frente, a la misma.

España, esta convertida, en un auténtico desastre nacional, sin que por el momento, se vea un rayo de luz, que nos aporte esperanza.

Se han adoptados medidas antisociales, tales, como la retención de parte de los salarios, a los funcionarios públicos, congelación de las pensiones a los jubilados, reducción de oferta pública etc. etc...

Las Autonomías, se han convertido en un gran cáncer, para la Nación, debido al desorbitado número de funcionariado, que las integran, y al despilfarro, que acusan sus economías, donde se dan cobijo a un elevado porcentaje de enchufados, que hacen que sean insostenible, sus precarias haciendas; disfrutan de coche oficial, todo quisqui, cuya presencia, en los supermercados , es ostensible.

Las provincias y municipios , aparecen completamente endeudados, por los gastos supérfluos, que originan, no pudiéndose abonar, las subvenciones contraidas. Los funcionarios exigen ,diariamente, los pagos de horas extraordinarias devengadas. Los proveedores van a la ruina, por impago de las instituciones públicas, agravándose cada día, más la situación, no encontrando solución alguna, a este conflicto.

Las familias se aprietan el cinturón, y el consumo se enfila cuesta abajo, mientras que el paro se acerca a los cinco millones, de ciudadanos sin trabajo.

La lucha , entre los politicos, es imparable, no poniéndose de acuerdo, cuando yo considero, que en estos momentos, de calamidad social, debían de ponerse, todos a una, creando un gobierno de salvación nacional, con la integración de todos los partidos políticos, y apretar, el hombro, todos a una, para afrontar, cara a cara, el grave problema nacional, que tenemos encima.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

RESUMEN HISTÓRICO, DE UNA ETAPA VIVIDA ( III )


Como consecuencia de la crítica situación, por la que atravesaba España, el día 18 de julio de 1.936, tuvo lugar un Alzamiento Militar, en Melilla, que era , asimismo, secundado en otras guarniciones castrenses, como ocurrió en Burgos, Salamanca, Galicia o Asturias.

En Andalucía, se levantó el General Queipo de Llanos, en Sevilla, quién personado en la Capitanía General, ubicada en la Plaza de la Gavídia, destituyó al General Jefe de la II División, Don José de Villabrille, que fue detenido,por un grupo de Oficiales.

Tuvo que hacer frente, a la resistencia , que presentaban los milicianos sevillanos en el macareno barrios de San Julián, al mismo tiempo que llegaban refuerzos de tropas del Norte de Äfrica, que ocupando varios camiones , dando vueltas, sin cesar, por la Ronda, nos daban o la sensación, a los ciudadanos de la capital, que Sevilla estaba totalmente ocupada por los moros.

Desde la zona minera de Riotinto, partió un comboy de dinamiteros, para ocupar la ciudad hispalense, al mando de un Comandante, que mandó instalarse en La Pañoleta, en espera de que él estudiara el plan a seguir, mientras se adentraba en la capital, poniéndose a las órdenes de Queipo de Llanos, quién puesto al corriente de lo que había, mandó a la Legión, para aniquilar a los pobres mineros.

Como agradecimiento, a tal servicio, lo nombró Jefe de la Columna, para la liberación de Huelva y de esta forma , el día 29 de julio, fue tomada por fuerzas legionarias la capital, que presentaba todas las puertas, de sus edificios, con paños rojos, como adhesión al gobierno legítimo de la República, cambiando su colorido, repentinamente, al blanco, como señal de paz.

En toda la ciudad fue instalado un amplio servicio de megafonía, con multitud de altavoces, en casi todas las calles, por los que se oían marchas militares, que los onubenses aprendimos de memoria.

Fueron jornadas de miedo y de terror, y sobre todo de noche, cuando, desde nuestras camas, sentíamos pasar, la fatídica camioneta del Bazar Mascarós, requisada para atender, estos servicios especiales de detenciones nocturnas y otros menesteres.

Todos los días, presenciábamos por nuestras calles desfiles marciales de falangistas, como de Flechas, celebrándose el 15 de agosto, en la Plaza de las Monjas, una Misa de Campaña, con motivo de la restauración de la Bandera de España, en detrimento de la republicana.

Se establecieron aquellas penosas jornadas del "Día del plato único", el "Día sin postres", así como , las jóvenes onubenses estaban obligadas a prestar servicios sociales , en los comedores públicos, para poder optar a algún puesto de trabajo.

Todas las noches, retransmitían las charlas de Queipo de LLanos, y una vez acabadas, estas, desde Radio Nacional de España, desde Salamanca, emitían el Parte Oficial de Guerra, a través del locutor Fernando Fernández de Córdoba, al mismo tiempo que muchos ciudadanos, con la radio puesta en las orejas, a escondidas, escuchaban la Radio Pirenaica, que por otra parte , nos informaban de las operaciones del bando republicano, que al día siguiente, daba lugar a que los ciudadanos formularan su respectivos comentarios.

Mientras tanto, se iban llamando a filas, nuevos reemplazos de quintas, que una vez que los mozos incorporados, realizaran su periodo de instrucción y juraran bandera, eran destinados a las unidades destacadas, en los campos de batallas.

Cada vez, que se tomaba por las fuerzas nacionales, una capital, se organizaban manifestaciones de júbilo , siempre con el mismo recorrido , visitando los Consulados de Alemania e Italia, transcurriendo, así la cosa, hasta finalizar, al cabo de tres años, esta contienda fratricida.

Se creó la Cartilla de Racionamientos,por la que se les adjudicaba, semanalmente a cada ciudadano, un cuarto de litro de aceite, 100 gramos e azúcar o 250 gramos de garbanzos, como igualmente, el bollo diario, surgiendo un nuevo negocio negro, paralelo, denominado "Straperlo".

La nota cotidiana, se centraba, en el trabajo de los Talleres de Riotinto, o en el ofrecía la industria pesquera, y hacia los años sesentas, en que se creó, en Huelva, el Polo de Desarrollo Industrial, que transformó,por completo la fisonomía de nuestra ciudad, instalándose muchas fábricas del ramo químico, llamándonos el "Bilbao del Sur", por habernos dado, lo que nadie, en otro sitio querían.

Lo más grande, que conseguimos, fue la construcción de los dos soberbios puentes, para comunicarnos con Punta Umbría, como a través del río Tinto, con el nuevo puerto, ubicado en término de Palos de la Frontera, obras magistrales, que llevó a cabo, el ministro de Obras Públicas, Don Federico Silva Muñoz, gran tecnócrata, al que Huelva, siempre desagradecida, no le concedió ninguna distinción.

Siempre es bueno, hacer alusión de lo positivo, que tuvo esta etapa, ya que de lo malo, es preferible no recordarlo, y así, es de agradecer la implantación del Seguro Obligatorio de Enfermedad, como la creación de subsidios varios,como el gran desarrollo en el campo de la vivienda y obras públicas, que ahí están palpables.

En lo político, me abstengo de hacer comentarios, por razones obvias, ya que sufrí mucho, toda vez, que en la vida estudiantil, quedé impregnado de mis ideales, que me inculcó la política reinante- republicana-, a través de la F.U.E. (Federación Universitaria de Estudiantes), que pagué con creces, siendo muy joven.

En mi servicio militar, me tocó ver, de cerca, los horrores de una guerra, desde mi puesto de Practicante de un Hospital de Sangre, en la 102 División, en los duros frentes del Ebro y Extremadura.

Ya, en mi vida de nonagenario, he sabido comprender y analizar, que el pueblo, en esta época se encontraba aislado de toda política, solo pensaba en el trabajo y en la instrucción de sus hijos, y siempre soñando con ver la luz, algún día, en el que dentro de las tinieblas, apareciera el brillo de la Libertad.