jueves, 19 de enero de 2012

LXVI.-LOS COMEDORES SOCIALES.




Hoy, mi memoria me trae aquellos años de pobreza, que vivimos los españoles a partir de la década de los veintes y de la que nos resentimos, en los momentos presentes a pesar del gran desarrollo que ha experimentado nuestra vida.

Recuerdo cuando siendo todavía un niño, como podía contemplar aquel triste espectáculo que en las mañanas de los sábados , al pasar por la céntrica Plaza de las Monjas, en las puertas del Juzgado de Instrucción, junto al popular y recordado Cinema Park, había una interminable cola para recibir de manos de Don José Saavedra una limosna de diez céntimos -la tradicional perra gorda-, con la que aquellos pobres infelices, llenaban parte de su flácido estómago, con el calor que le proporcionaba el bollo de pan, que lograban adquirir, por la dádiva recibida.

Siempre han existido pobres, y observaba aquella larga fila de necesitados que cubría la calle Rábida, para coger plaza en los comedores de San Vicente de Pául, que tenían las Hermanas de la Caridad en la Carretera Odiel, actualmente Avenida de Italia, conocida por los onubenses como "Fonda de las Tres Chicas", donde eran atendidos amorosamente

Duraante el periodo republicano, el catedrático don Amós Sabrás Gurrea, creó la Asociación "Los Amigos de Niño", que montaron un Comedor en el Punto, al inicio de la Avenida de la Escultora Witney, atendiendo a muchas criaturas necesitadas de nuestra ciudad.

En el anterior régimen "Auxilio Social", tenía establecido un servicio de comedores, en las zons perisféricas, que se veian completamente abarrotados, en aquella tristemente época de lahambruna.

Era tal el hambre reinante, que nos asolaba, que mis ojos presenció el hecho de que un ciudadano, al comerse un plátano,en plena calle,al tirar la cáscara al suelo, tres personas se lanzaban sobre ella para sosegar su estómago.

Hoy día, al recordar aquellos trágicos momentos que vivimos, veo y compruebo, según he visto por la televisión, que se tiran a los contenedores de la basura en el mundo, ochenta y nueve millones de toneladas de alimentos, diariamente, ante su posible caducidad, por las grandes superficies.

Es intolerable esta situación, cuando bien se pudieran remitir a los numerosos bancos de alimentos, que existen, y desde donde se pudieran encausar a los distintos comedores donde atender a tantos necesitados, que agradecerian esta gran aportación alimentaria, toda vez que se está viendo ,diariamente, que organismos como Cáritas Española, no puede dar abasto a tantos ciudadanos que acuden a sus comedores, por no llegar su finaciación a cubrir todas las necesidades que se le presentan actualmente.

1 comentario:

  1. Una lástima cómo no valoramos lo que tenemos ni pensamo que hace pocas décadas bien distinta era la situación.

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Agradezco vuestra colaboración,espero veros a menudo por aquí.