miércoles, 25 de julio de 2012

XC.-LAS ANTIGUAS PANADERIAS ONUBENSES



Quiero hacer mención en este trabajo semanal,  a las numerosas panaderías conque contaba nuestra ciudad en la década de los años treintas.,  en la que éramos  un pueblo grande, con una población de  cincuenta mil habitantes.

Empezando por las zonas periféricas, en  la barriada de la Isla Chica, existía  el obrador de Ruedas  donde además del  pan elaboraban sus deliciosos bollos de leche, tortas y ensaimadas-

En el barrio del Matadero, la exclusiva en este ramo la ostentaba Paco Millán, cuyos descendientes siguen llevando las riendas de su  negocio familiar.

Ya, adentrado en el centro urbano, en la calle Berdigón, adquirió gran fama la panadería de Andrés Puig. que elaboraba el mejor pan, para el gusto de los onubenses.

En la misma calle estaba establecida la de la familia Colombo, como la  popular tortería de Luengo,con sus acreditados hornazos y aquellas deliciosas tortas de aceite tan solicitadas por su  numerosa clientela.

En los Cuatro Cantillos existía la de Ramón Segura, que nos mostraba los railes  hasta la puerta, donde una vagoneta cargaba las sacas de harina para  llevarlas al obrador.

En la marinera calle de Miguel  Redondo. era muy popular la panadería del Loro, regentada por la familia Sánchez Serrano, donde se  ofrecía las soberbias vienas, así como las molletas,tan clásicas,, y tortas de aceite,y ensaimadas de gran aceptación por  parte de sus convecinos.

En la popular Plaza de las Monjas, junto al templete de música estaba establecido  Restituto Santos, de cuya puerta salía con dirección a Ayamonte, el  microbus de Arturo Damas, en sus inicios y que sirvió de base al gran emporio , de lo que es  en la actualidad.


En  Méndez Núñez, frente al viejo Instituto, estaba "La Popular", donde los estudiantes nos proveiamos de aquellos  deseados bollos, que adquiríamos  por la módica cantidad de diez céntimos, que devorábamos  en el espacio de entre clases. Fueron muy acreditados los deliciosos mantecados que elaboraban en  la época navideñas,en la que se formaban largas colas para adquirir un kilogramo por el precio de tres pesetas, con lo que junto al anís de Hierro,completaban el ágape con el que las familias onubenses, en aquellos tiempos de pobreza, hacían felices  a los hogares onubenses.

Una vez que sobrepasábamos el Bazar de Mascarós, se percibí el olor a pan caliente que nos proporcionaba  la panificadora de  don Mariano, famosa por los  roscos con sus tres aros.

En la calle Rascón, en las proximidades de la antigua Tabacalera  estaba ubicada  la panadería de  "La Joya" donde era frecuente ver en  su puerta descargando los clásico carros  de jaras de nuestro envidiable  Andévalo.

En dirección a  la Vega,  se encontraba la "Panificadora de San José" y en la barriada de Las Colonias existían dos mas. cuyos dueños , junto al ya mencionado Paco Millán , eran miembros de la Hermandad de la Sagrada Cena, por lo que primeramente la conocían como la Cofradía de los panaderos.

En el periodo republicano se puso en marcha la "Panificadora  de Nuestra  Señora de la Cinta" anexa a la   fábrica de harinas de  "Santa Lucía", propiedad de la familia Pérez de Guzmán,que abrió sucursales
por distintos puntos de la ciudad.

Hoy día, casi todas han desaparecidos, toda vez que las  Grandes Superfícies, son las encargadas  de
la venta de tan solicitado articulo, en su mayoría prefabricado, que no tienen siquiera parecido alguno con el de nuestros tiempos, fabricados al horno con leña de jara, que les dabas ese sabor tan característico, que recordamos con nostalgia los viejos onubenses.


2 comentarios:

  1. Mas de un polvoron he liado, en aquel altillo de madera donde se elaboraban, los mas rico que nunca comí, por que a mi me gusta el mazapán.

    gracias por traernos los recuerdos y los olores.

    cordiales saludos

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  2. Perdon.

    me refería a la panaderia-dulceria La Popular.

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Agradezco vuestra colaboración,espero veros a menudo por aquí.